A la atención de Recursos Humanos


Recursos Humanos

Estimados Sres.,

Me pongo en contacto con ustedes para presentar una queja formal por lo que considero un trato vejatorio de la institución en la que desempeño mis labores profesionales hacia mi persona en cuestión de valoración como individuo.

Verá usted, sobre el asunto del horario y el nuevo sistema de fichaje con tarjeta electrónica más el informe mensual de tiempos cumplidos, con su debe y haber, quisiera que supiera que nunca antes, cuando trabajé fuera de mi horario habitual estipulado, realizando un mayor número de horas, se me informó sobre esa balanza positiva a mi favor y, ni mucho menos, recuerdo que se haya visto reflejado en la nómina.

Hoy en día tengo hijos y los 1.000 euros que esta empresa me abona mensualmente en neto, con las 2 pagas extras prorrateadas ya incluidas en ese importe, teniendo en cuenta mi nivel de vida, austero a la fuerza por otra parte, no puedo permitirme el lujo de pagar una guardería. Por ese motivo tengo que contar siempre con la familia. Sobre todo alguna de las dos abuelas, a las que debo mucho y puedo pagar poco. Y sé que esto es una cuestión personal. Una cuestión personal en la que mi vida laboral y por ende, esta institución, tiene mucho que ver.

Ocurre que en ocasiones puede resultarme imposible entrar a trabajar a las 09:00 horas tal y como se me reclama porque, aunque a usted no le gusta o le resulte indiferente, los niños tienen la costumbre de tener catarro o alguna fiebre, aunque gracias al cielo, muy de vez en cuando.

También quisiera que estuviera informado que de esos 1.000 euros, dado que tengo que desplazarme unos 80 kilómetros desde mi hogar hasta la sede de esta institución, para venir, y otros tantos para volver, trabajar aquí me supone un coste de unos 200 euros mensuales. Sólo por trabajar aquí. Eso por no contar que cuando he de hacer un recado para esta institución, suelo ser yo y no la entidad, quien paga los taxis y los autobuses.

Nunca antes me he quejado, pero ahora quisiera que lo supiera ya que si tengo que salir a las 20:30 horas, tal y como se me pide, en vez de a las 20:00 horas como venía siendo habitual, tendré que utilizar mi coche particular en vez del transporte público, por lo que el gasto, incluyendo estacionamiento, se verá incrementado.

Me permito esta oportunidad para hacerle saber también que no me parece correcto que nos hayan subido el importe de los almuerzos en el comedor y aún mucho menos que se haya decidido cobrar a los trabajadores el 50% de la vestimenta que la empresa nos proporciona y nos exige, como parte de su identidad corporativa.

Verá usted, si lo pienso bien y hago cuentas, si de esos 1.000 euros tengo que pagar una guardería, usar mi coche particular, pagar más por la comida del mediodía y, además, pagar su uniforme, resultará que pueda darse la curiosa circunstancia que sea yo quien les deba dinero a ustedes para tener la oportunidad de trabajar.

Esperando que esta empresa reflexione y decida verme a mí, y el resto de los trabajadores, como personas, con vida personal además de la laboral, que ha de ser compaginada, que producen un beneficio y una riqueza a esta institución; y no como una ristra de fríos números, se despide su atento servidor,

Juanito Mileurista

No hay comentarios:

Publicar un comentario